Irlanda cambiará su legislación para evitar el sobrediagnóstico de autismo y TDAH

El Consejo Nacional para la Educación Especial alerta del alto número de niños «etiquetados innecesariamente» para recibir refuerzos educativos

058-irlanda-sobrediagnosticoIrlanda es el último país donde han saltado las alarmas por el sobrediagnóstico de trastornos como el TEA o el TDAH en la infancia. El Consejo Nacional para la Educación Especial de Irlanda (NCSE, por sus siglas en inglés), ha alertado de que cada vez a más niños se les diagnostican trastornos sólo para que reciban recursos, incluso aunque no encajen en el diagnóstico. Los responsables del NCSE han alertado sobre las nefastas consecuencias de imponer a un niño una etiqueta inapropiada «que se le pegará para toda la vida». En Irlanda se han tomado en serio esta advertencia, y desde el Ministerio de Educación están trabajando conjuntamente con el NCSE para promover un cambio en la legislación y un nuevo modelo de distribución de los recursos que elimine la necesidad de presentar obligatoriamente diagnósticos psiquiátricos, y se centre en las necesidades de apoyo educativo. El Ministerio incluso anima a las familias a recurrir al colegio profesional u organismo gubernamental competente si no consideran adecuado el diagnóstico realizado por un facultativo. Sigue leyendo

Hace 4 años que te quisieron etiquetar con autismo…

Destacado

dejemosles-crecerQuerido hijo:

Dentro de poco cumples 7 años. Cuando te veo esperar con ilusión tu fiesta de cumpleaños, planificar todos los detalles, hacer la lista de invitados, desear que vengan todos tus amigos, soy tremendamente feliz. También cuando te veo correr detrás de tus amigos al salir del cole, cuando me cuentas cosas que has hecho a lo largo del día, cuando charlas animadamente con compañeros, cuando veo lo bien que llevas los estudios, cuando me pides ir a casa de un amigo, cuando hablas de mundos fantásticos, cuando pasas largos ratos inventando historias con tu hermano… Te preguntarás por qué me alegra tanto ver que haces cosas totalmente normales para un niño de tu edad. Sencillamente porque, en algún momento, me hicieron creer que esto nunca ocurriría.

Por difícil de creer que te parezca ahora mismo, hace unos años, un puñado de personas que habían estudiado cómo deben ser los niños pensaban que tú nunca podrías ser como eres hoy por ti mismo, que nunca podrías hacer lo mismo que otros sin ayuda, que cada día estarías «más lejos». Muchas de estas personas intentaron convencerme de que tenías un trastorno, e hicieron grandes esfuerzos para que estampara en un papel la firma que te separaba de un diagnóstico de autismo. Cada día estoy más contenta de no haberlo hecho. Sigue leyendo

Los diagnósticos psiquiátricos de los niños deberían escribirse siempre a lápiz

Artículo original publicado en Huffington Post el 31 de octubre de 2016
por el Dr. Allen Frances, Catedrático Emérito de la
Universidad de Duke y miembro del consejo redactor de la 4ª edición del
Manual Diagnóstico y Estadísico de las Enfermedades Mentales (DSM-IV)

allen-frances2Las tres modas más peligrosas en el diagnóstico psiquiátrico durante los últimos 20 años han afectado a los niños. Las tasas de Trastorno de Déficit de Atención (TDAH) se han triplicado y las tasas de autismo y trastorno bipolar se han visto increíblemente multiplicadas por 40 (https://www.psychologytoday.com/blog/dsm5-in-distress/201006/psychiatric-fads-and-overdiagnosis).

Poderosos factores externos han contribuido en gran medida a esta proliferación de etiquetas erróneas en los niños. En el caso del TDAH y el trastorno bipolar infantil, las compañías farmacéuticas han vendido la enfermedad de forma engañosa y agresiva para «colocar» sus caras y rentables pastillas. Su estrategia de marketing se basaba en la cínica asunción de que iniciar a un niño en el consumo de pastillas de forma temprana puede convertirlo en un cliente para toda la vida.

La explosión del autismo resultó de la combinación de dos factores: la introducción en el DSM-IV de una forma mucho más leve de autismo (Asperger) y la asociación demasiado cercana de los diagnósticos a la posibilidad de recibir refuerzos educativos. Los diagnósticos psiquiátricos desarrollados con fines clínicos son inapropiados como porteros para el acceso a la asignación de recursos educativos. Las decisiones educativas deberían basarse en las necesidades educativas de los niños, evaluadas por los educadores, empleando herramientas educativas. Sigue leyendo